Pequeñas noticias

A veces hay pequeñas noticias que conllevan un aluvión de reflexiones. A mi me parece que es el caso de la siguiente: en un aeropuerto de Florida, una maleta sospechosa llama la atención de los encargados de seguridad. El equipaje se "mueve" misteriosamente. Antes de despegar interrogan a la propietaria. Ante sus respuestas evasivas la hacen desembarcar sospechando que la maleta pueda contener una bomba. Con muchas precauciones la abren. ¿Era una mascota? ¿Un expediente X? No. Era un vibrador.

Renee Koutsouradis, que es el nombre de la propietaria ha denunciado a Delta Airlines porque al parecer la persona que abrió su maleta mostró el vibrador a sus compañeros. Otros pasajeros pudieron contemplar la escena durante más de un minuto. Alega daños psicológicos y reclama una indemnización de 15.000 dólares.

Como decía hay pequeñas noticias que dan que pensar. En primer lugar apoyo incondicionalmente la denuncia. Me puedo imaginar el bochorno que debió pasar la propietaria del artilugio, sobre todo si tenemos en cuenta las carcajadas que, al parecer, soltaron los de seguridad y los pasajeros. Por otro lado me pregunto a que niveles está llegando la obsesión con la seguridad. Y sobre todo, hasta donde llega la falta de ética de quién no fue capaz de tratar el asunto con la discreción que se merece.

Después están los comentarios que produce el incidente. En una emisora de radio oí la noticia. A continuación se abrió un pequeño debate. Aunque los tertulianos estaban de parte de la denunciante no pudieron dejar escapar algún comentario del tipo "imagínense la vergüenza de esta mujer que tiene que recurrir a este tipo de aparatos", como si fuera algo perverso o irremediable. Quizá la vida sexual de esta mujer sea muchísimo más rica e interesante que la del comentarista radiofónico sin tener que ser moralmente reprobable. Pero en fin, está claro que el machismo no se demostró únicamente en el aeropuerto.

Hay mas lecturas: la falta de intimidad, la vigilancia feroz que atenta contra las libertades personales, la relación con el cliente. Si. Muchas cuestiones.

Alguien me comentó que ella también podía haber quitado las pilas. Cierto. Pero seguro que todos los que llevan maquinas de afeitar, radios o discmans no tiene que preocuparse de eso. Con pilas o sin ellas las demás cuestiones siguen esperando respuesta.

De: lgs

Fecha: 2002-07-31 10:01

Más lecturas y comentarios:

- Por motivos de seguridad, pensando en una bomba, abrieron la maleta delante de muchas personas. Qué bien. No mencionas que nadie llevase un antifaz antibombas ni nada de eso.

- ¿Qué habría pasado si ella hubiera dicho "no, mire, es que tengo un vibrador y seguramente es que me lo dejé encendido"?

- ¿Puede ella alegar daños psicológicos si les dejó abrir la maleta delante de mucha gente?

- ¿Puede ser que no se acordase de que tenía el vibrador allí o que no sospechase que sería justo eso la fuente de la vibración (con una máquina de afeitar, nunca se me ocurriría pensar que me la dejé encendida)?

- ¿Podría uno reconocer sus propios aparatos si zumban dentro de una maleta? Con suficientes calcetines, hasta un móvil o un despertador bien amortiguados seguramente suenan raros.

- ¿Cuánto tiempo aguanta un vibrador de esos encendido? ¿Puede ser que el policía o los mirones tuviesen envidia de tanto aguante?

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